El auto-engaño

 

Lo peor que puede hacer un ser humano es auto-engañarse… 

El ateo se engaña al no creer en Dios, el rico se engaña confiando en el dinero, el homosexual se engaña pensando que su orientación de estar con su mismo sexo es buena pues para él, eso es amor también, la madre que aborta se engaña al pensar que es su derecho matar al bebé… pues es su cuerpo y ella decide.

Se engaña el político que va a enriquecerse negociando desde su puesto de poder, pero para eso el político no fue elegido sino para hacer el bien y la justicia. Se engaña la persona común y corriente que piensa que Dios es tan Misericordioso que no condenará a nadie, pues tanto amor rechazará Su Justicia Divina.

Si… Dios es Amor, Su Misericordia es eterna, pero Su Justicia por igual, Su Justicia Divina tiene como esencia la Verdad y es la Verdad también Misericordia y la Verdad es Amor y la ausencia de verdad es la mentira y la herramienta de la mentira es el engaño.

Engañar a las personas se da en nuestra sociedad y es tan fácil para el enemigo, pero engañarse a uno mismo con error y falsedad, es un trabajo tan minucioso del diablo y es todo para destruir nuestras almas.

Las almas que se auto-engañan, TODOS y cada uno, NO se levantan en la mañana pensando en lo eterno, NO viven suspirando por lo eterno y MENOS aún se acuestan pensando en lo eterno.

Todos pensamos en Dios cuando la vida nos está por liquidar, cuando los problemas nos sacuden, nunca pensamos que, salimos del cielo y al cielo debemos volver con Dios.

Ahora te pregunto, cuán auto-engañado tú estás?

Examina tu vida, busca a Dios y Su Justicia y los engaños huirán, Su Misericordia será tu vida y verás la eternidad cada vez que abras tus ojos. Aleluya